
Con la encargada regional del Instituto de Derechos Humanos se reunieron los familiares del menor de 17 años de edad que fue golpeado y detenido injustamente por funcionarios de Fuerzas Especiales el pasado martes en Cañete tras una marcha Mapuche que terminó con incidentes en el centro de la ciudad.
«Mi hijo vino a Cañete a comprar y al pasar por el lugar un carro de Fuerzas especiales lo chocó por detrás, lo bajaron y lo metieron al móvil policial, en su interior lo patearon y amenazaron con matarlo. Mi hijo nada tenía que ver con la marcha», denunció Benedicto Fica, padre del adolescente detenido en calle Villagrán, entre Ignacio Carrera y Sargento Aldea.
El parte médico de la constatación de lesiones indica que a Camilo se le diagnosticó un esguince de tobillo y una herida de la pared abdominal. «Carabineros de las Fuerzas Especiales no me preguntaron nada, sólo se dedicaron a pegarme golpes de pies y puños al interior del carro policial», contó el menor.
El círculo familiar espera que la justicia haga su labor y castigue el actuar de los funcionarios que le propinaron la dura golpiza y detención arbitraria, y por lo mismo, recurrieron al Instituto de Derechos Humanos para perseguir a los autores de este hecho que tiene a funcionarios de Carabineros en la mira.